Letter To My Mom

Created by K 11 years ago
Hace un dia que te fuiste al Cielo. Fue como si hubieran desahuciado mi alma. Y todavía recuerdo que por telefono me dijiste “Hijita Mia, como estas? Y yo te decia Mamita estoy bien no te preocupes por mi, dime como estas tu y tu me decias Tranquila mi Hijita estoy bien, no pasa nada”. Sentia que sufrias, con un dolor casi clandestino. No querías preocupar a nadie. Y colge ahi sabiendo que estarias en casa con mis hermanas y mi padre. Hace unas horas te me fuiste. Hacía frío y era febrero. Llegué al hospital , buscándote y cuando te vi, te abraze y bese tus manos y todo tu cuerpo ¿Lo recuerdas? Lloré mucho internamente. Besé tu frente como quien explora la eternidad. No se me puede olvidar jamás aquella imagen tuya. Recuerdo que abraze a cada uno de mis hermanos y a mi padre, pero era muy duro pensar que te me estabas muriendo , esperaste por mi, sabias que llegaria y me esperaste, al pasar 20 minutos que estaba al lado tuyo, te me fuiste. Las palabras parecían desvanecerse, en la duda, en una congoja insuperable, en un verdadero motín del alma. Gracias madre mia por esperar por mi, se cuanto me amaste y no sabes como me hacias falta y me haras mucha falta. Para mí no estas difunta. Y sigues sin estarlo. Hablo contigo diariamente, siento tu presencia… No, no eres una fantasía. ¡Qué madre lo es! Sigues ayudándome. Formas parte de la providencia amorosa en mi vida. Y lo noto. Y quiero dar fe de ello, y escribirlo, y proclamarlo a los cuatro vientos. ¡Cuánto debemos querer a nuestras madres! “Tener fe es lo más importante”, decías. Y esa fe me dice que el amor no puede morir nunca. No eres un simple y escurridizo recuerdo, un vago sentimiento donde se cobija mi añoranza. Eres mi madre, mi más inquieta quietud, la precisión de una voz que habita desde mi pasado, mi presente y el milagro de mi futuro. Y la verdad es que tengo ganas de volver a verte. Bien lo sabes. Sin ti la vida es menos vida, y cuando llamo a tu teléfono ya no estás ahí para decirme: “¡Mi Hijita!”. Y eso es algo que pesa. Un pesar que a veces sobrellevo mal. Y es que los hijos necesitan de una madre. Incluso Dios quiso tener una, para escándalo de muchos y consuelo de todos. María virgen, Madre de Dios y Madre nuestra. ¡Qué grandeza! La divinidad se sujeta a la humanidad. En un gesto de amor tan elocuente como inagotable. En un gesto de humildad que nos salva. Y Humildad era y es tu nombre madre mía, Mamá. Nunca podré agradecer bastante el cariño que me diste y lo que me ensenaste para luchar por la vida. Ayer murió mi madre. Y con ella murió una parte importante de mí mismo. ¡Qué terrible sentimiento! Porque, asi enferma seguía siendo ella y a mí aún me parecía hermosa y llena de vida... y estabas ahí, cada vez que te llamaba. Ayer aún tenía madre.   Ella seguirá ahora su camino. Se habrá reunido con mis bisabuelos a los que tanto quiso y tanto asu la quisieron, que, con toda seguridad, habrán acudido a recibirla. Y emprenderá una nueva etapa con la satisfacción del deber cumplido. El fardo de la vida quedará atrás, y sentirá su alma ligera, libre, sin limitaciones, y nos enviará sus recuerdos y su amor y nuestra gratitud, y nuestros pensamientos cariñosos acariciarán su rostro... ¡Adiós madre! ¡Adiós mamá! Bendita seas

Pictures